En 2016 Adrián, junto a sus dos hermanos, Luciana y Sebastián, deciden importar Kamados y crean Kamado Argentino en busca de desarrollar un nuevo concepto: la fusión entre Argentina y el asado, con la cocina japonesa y el milenario Kamado. Así fue como unieron sus dos pasiones: la gastronomía (fundamentalmente el fervor por la cocina con brasas y fuegos), y el emprendedurismo, el desafío de emprender siguiendo esa corazonada y sus deseos.
Kamado Argentino fue pensado desde el primer momento como marca referente y especialista en la región. La impronta siempre estuvo marcada por la mejora constante en la calidad y por buscar mantener la cercanía con la comunidad Kamado Argentino.
En 2019, Kamado Argentino continúa buscando la perfección en la elaboración de sus productos propios y decide crear su propia línea de carbón y astillas para ahumar, los dos principales consumibles del producto.